¿Paz y amor en Navidad? | Tres Tristes Tigres

sábado, 22 de diciembre de 2007

¿Paz y amor en Navidad?

A mucha gente le gusta la Navidad, no es mi caso, se dice ser una fiesta entrañable. Pero no todo es paz y amor. Una prueba de ello es que el 60% de los pacientes con transtornos de ansiedad empeoran en esta época, según el Instituto Aragonés de Ansiedad.

Los compromisos, las reuniones familiares, los regalos, todo esto y más hace que el nerviosismo se extienda en muchos ámbitos tales como:

Que en las parejas se disparen los divorcios.
El mayor número de demandas de separación y divorcios se da tras las Navidades, entre enero y marzo, según datos del Consejo General del Poder Judicial. En el primer trimestre del 2007 fueron 40.630 y en el segundo 37.125. "Conviven con la familia de ambos, pasan más tiempo juntos y las diferencias son más evidentes", explica María Jesús Nieto, presidenta de la Asociación Madrileña de Terapia de Parejas. "Los gastos y los niños agudizan la tensión".

En cuanto al tráfico, aumentan los nervios al volante.
El aumento de los desplazamientos para las compras de Navidad genera más tráfico, colapsos en el centro de las ciudades y colas para aparcar en los superficies comerciales. Todo esto aumenta el estrés del conductor y genera mayor hostilidad al volante y más altercados, según Juan Antonio Sánchez-Trillo, psicólogo del departamento de Seguridad Vial del RACE.

En las prisiones aumentan los conflictos.
La Navidad es un motivo más de preocupación para los vigilantes de las cárceles españolas, ya de por sí caldeadas por el problema de masificación. Según J.Ramón García, presidente del sindicato de prisiones CSI-CSIF, no hay día en que no se produzcan conflictos y agresiones y en Navidad la situación empeora porque los presos "añoran lo que hay fuera y se ponen más nerviosos. Les cambia el humor".

En el campo de la Educación están las notas y las vacaciones.
Según se acercan las vacaciones la ansiedad invade las aulas. Además de las fiestas, "los alumnos están esperando nerviosos las notas, y muestran cansancio de los 3 primeros meses de clase". La gran preocupación para padres y profesores llega el último día de clases, el conocido como "día de pellas".

Lo referido a la Sanidad están las urgencias y las buenas intenciones.
Los nervios en las salas de espera de los hospitales se atenúan, según Manuel Rodríguez, secretario de la Federación de Sanidad de CCOO en Madrid: "Todos intentan poner de su parte. El personal se acerca más a los enfermos y los usuarios son más pacientes con los que trabajan en Nochebuena y Nochevieja". La calma es necesaria en una época en que, según la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria, los sanitarios trabajan el doble por la falta de suplentes y las urgencias derivadas de los excesos.


En definitiva, a mí antes de leer esto ya no me entusiasmaban estas fechas pero ahora menos. En mi opinión es la época del año de más hipocresía de la gente y esto es algo que no soporto, me puede la verdad... Además claro está de los excesos que esta época conlleva, que si regalos, salir de fiesta, cenas y comidas por todo lo alto y un largo etc.

Y a ti, ¿te gusta la Navidad?


Fuente: Periódico 20 minutos.

1 comentarios:

Pablo Franco dijo...

Yo veo tres manera de afrontar la Navidad:

-Dejándose llevar por la sociedad: es decir, inflándote de turrón, gastándote la paga extra en regalos y el sueldo normal en lotería.

-Oponerse a la sociedad: estar de mal humor, no comprar regalos a nadie (cuantas navidades así...) y ladrarle a cualquiera que te diga Feliz Navidad.

-No pensar en que estamos en Navidad: esta es mi opción. Yo paso de todo, eso sí, se que el lunes mi madre va a hacer una cena que te cagas, pues me aprovecharé de ello poniéndome las botas. Por supuesto no compro lotería. Como el mismo dulce que el resto del año (aunque coma turrón) y casi no gasto en regalos, sólo compro algo realmente necesario para la casa y para que mis padres no vean que soy un pasota social con ideas independientes.

De todas maneras en mi casa pasamos de la Navidad bastante, de hecho ya nos hemos dado los regalos... Con la mala suerte de que mi padre y yo hemos comprado lo mismo, un teléfono inalámbrico para la casa. Parece que falta comunicación entre mi padre y yo.

Con todo este rollo lo que quiero decir es que lo mejor es que viváis como siempre pero aprovecharos de las cosas buenas de la Navidad: comida, días festivos, días de fiesta (si tenéis ganas de fiesta), etc. E intentad evitar las cosas malas de la Navidad: atascos, aglomeración de gente y si os jode tener que decir "igualmente" cuando os felicitan podéis decir:

A pasarlo bien!

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